lunes, 18 de julio de 2011

75 años de polvo

Tal día como hoy, hace 75 años, parte del ejercito español se sublevó contra el gobierno de la segunda república española, llevando a cabo un golpe de estado que fracasó y que desencadenó en la tan conocida guerra civil española, con su también conocido resultado, una oscura etapa de 36 años que sufrieron muchísimos españoles.

Muchas cosas han cambiado desde entonces, pero lamentablemente no las suficientes. Pero lejos de querer perderme por esos derroteros, sí quisiera centrarme en un aspecto concreto bastante importante que llevamos cargando como un lastre toda la sociedad desde la transición, y este aspecto es la tan controvertida memoria histórica.

La realidad en España es que tanto por parte republicana como por parte sublevada existieron numerosas bajas, cifrándose estas entre 500.000 y más de 1.000.000 de personas. ¿No resulta curioso que no exista una cifra real concreta?, bueno, pues aquí llega el debate. Las bajas del bando sublevado están bastante bien documentadas, ya que al finalizar la guerra civil el régimen franquista elaboró un exhaustivo estudio que recoge a las personas asesinadas por los republicanos, identificando a las mismas y otorgándoles todos los honores en su muerte. Dicho estudio cifra en 38.563 las personas asesinadas por la represión republicana. Mientras tanto, el mismo régimen que llevó a cabo dicho estudio silenció la represión a la que sometió al bando republicano (y personas afines a él) en la guerra y durante la dictadura, haciendo hoy en día que la tarea de cifrar estas muertes sea bastante ardua. No obstante, el historiador Paul Preston calculó el número de muertos en 200.000, mientras que el juez Baltasar Garzón elaboró un listado junto con los ayuntamientos españoles en el que cifra a los asesinados en 143.353 personas, siendo estos datos no muy fiables ya que según sus propios autores todavía faltarían muchos nombres y a la vez podría haber nombres que estuviesen duplicados.

Sabiendo esto nos podemos dar cuenta de que actualmente en España existen numerosas personas que han sido enterradas con honores, y otras muchas que, al contrario que las primeras, siguen siendo polvo en cunetas de caminos y fosas comunes. Por ello creo que deberíamos empezar seriamente a abrir fosas comunes para rescatar del olvido a aquellas personas que, al igual que nosotros, merecen un respeto. Todo esto no creo que sea remover la mierda pasada, sino curar la herida que sigue abierta para así, al fin, calmar las angustias y pasar página de una vez por todas.

2 comentarios:

  1. Estimado amigo como siempre un magnífico artículo.
    Y con respecto al mismo indicarte que me preocupa mucho como se está reescribiendo la historia, como se está tergiversando la misma, y como muchos de nuestros amigos/as casi ni saben lo que ocurrió, o que era el franquismo.
    Las nuevas generaciones a penas saben nada de este período tan negro de la historia de España, pues casi nunca da tiempo a estudiarlo en el instituto, y en fin... que es bueno recordarlo para que cosas tan horribles como éstas, no se vuelvan a suceder.
    Un fuerte abrazo, y viva la democracia y la libertad.

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  2. Muy buenas Óscar, como siempre me alegro muchísimo de que te pasees por aquí. La verdad es que opino igual que tú al respecto, es una vergüenza que la historia se cuente según las ideologías imperantes del momento, ya que el franquismo fue lo que fue, y no se debería desvirtuar.

    Un abrazo y ¡viva!

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