Toda persona poseé dos madres, aquella que le crea como individuo y aquella que le crea como ser. La primera es fácil de reconocer, pues es una Homo sapiens subsp. sapiens, de unas características corporales concretas y con un carácter personal determinado; además, ella es con quién interactuamos la mayor parte del tiempo en nuestros primeros años de vida y es quién nos educa en los valores que creé correctos. En cambio, la segunda es más confusa, más ambigua, más difícil de percibir y sobretodo de aceptar como madre. Ella es quién, tras millones de años de evolución, nos hizo nacer como nacemos, es decir, nos hizo ser mamíferos, omnívoros, bípedos y racionales. Sus facetas son tan variadas como variado es el planeta Tierra, ya que se compone por todo aquello que nos rodea, desde el viento y la temperatura hasta las bacterias y la sal marina; es más, se compone por todo aquello que rodea a un gorrión, siendo nosotros mismos parte de ella. Esta idea es costosa de asimilar, pero por mucho ego que nos hiera debemos aceptar que somos parte de ella, al igual que un día fuimos parte de nuestra madre vivípara en el interior de su vientre, o al igual que una célula forma parte de nuestra epidermis. No somos seres independientes a la naturaleza, sino que formamos parte de la misma, somos naturaleza.
Solamente cuando nos sintamos orgullosos de compartir casi la totalidad de nuestros genes con los de un chimpancé, solamente entonces, nos conoceremos por completo y comprenderemos la importancia de preservar y conservar nuestro entorno, de cuidar a nuestra madre.
Muy bonito el texto que has escrito, a la par que acertado. Felicidades
ResponderEliminarMe encanta Cristian, muchisimas felicidades y como decia un viejo scout: "debemos dejar el mundo en mejores condiciones de como lo encontramos"
ResponderEliminarGran reflexión, veo que ahora que estás en las garras de tu segunda madre, que la ves más de cerca que los que vivimos rodeados de muros, abres tus ojos y contemplas la grandiosidad de la naturaleza de Gaia.
ResponderEliminarNo considero que no lo hicieras antes.
Un saludo.
Muy bueno Gila, me ha gustado :)
ResponderEliminarComo ya te dije, el estar en un lugar apartado de tanta tecnología te hace ver el mundo con otros ojos.
ResponderEliminarEspero que nos sigas aportando estas reflexiones.
Un saludo!